A todos nos ha pasado que tenemos una pared vacía y nos gustaría decorarla pero no sabemos qué elementos utilizar.Los cuadros y los espejos son los pioneros en hacer acto de presencia en las paredes. Sin embargo en la actualidad son muchas las alternativas (cestos, platos, letras, máscaras, etc.)
Para evitar tener que agujerear la pared en repetidas ocasiones sin éxito alguno, es fundamental hacer una especie de croquis en papel que te permita «recrear» lo que realmente quieres y sobre todo poder ir jugando con las distintas opciones para que el resultado final sea 100% acertado.
Los objetos decorativos que colocamos en las paredes cumplen tres funciones básicas:
- Aportan personalidad.
- Son útiles para reforzar el estilo decorativo.
- Ayudan a crear efectos visuales.
Dependiendo de las dimensiones del espacio disponible, podemos optar por emplear un único objeto o bien crear un conjunto («Collage«) con distintos elementos.
Para esta segunda alternativa, tenemos dos posibles escenarios:
1.Utilizar varios objetos de una misma temática (ejemplo: Temática ESPEJOS = Colocar varios tamaños y modelos de espejos).
Cuadros:
Espejos:
Cestos:
Platos:
Máscaras:
Cabezas de Animales Sintéticas:
Letras:
2.Emplear varios objetos de distintas temáticas (ejemplo: Temática MIXTA=Mezclar cuadros con espejos y con otros elementos decorativos).
Apuesta por crear un «Collage» en cualquier estancia: ya no tienes excusa para cubrir esa pared triste de tu casa y hacerla más personal.